¿Qué es la resiliencia?
Para entender qué es la resiliencia podemos considerar unos conceptos clave:
- Tu capacidad de resiliencia puede entenderse como la cantidad de energía que se ha almacenado en tu batería interna.
- Cuanto mayor sea tu capacidad y tu resiliencia, más energía tendrás disponible.
- Tener más energía te da una mayor capacidad para autorregular tus emociones, pensamientos y comportamientos, para que puedas elegir cómo responder en lugar de reaccionar automáticamente.
- El aprendizaje y la aplicación de las técnicas de coherencia entre corazón y mente pueden aumentar tus reservas de energía, incrementando así tu capacidad de resiliencia.
- Sellar las "fugas" de energía a lo largo del día para no desperdiciarla es la clave para construir y mantener tu resiliencia. Dormir lo suficiente para recargar tu batería interior también es esencial para construir tu resiliencia.
¿Qué es la resiliencia y qué tiene que ver con la gestión de la energía?
Es probable que hayas experimentado momentos en los que sientes que no tienes mucha energía y puedes haber usado frases como: "Estoy agotad@" o "No doy más de mí”, para describir la sensación de estar cansad@. Es común que cuando tu energía es baja y te sientas agotad@, te sea difícil pensar con claridad, realizar bien las tareas y recuperarte, todo lo cual es un indicador de que tu resiliencia es baja.
Entonces, ¿qué es exactamente la resiliencia y cómo puedes tener más de ella?
La definición de resiliencia ofrecida por el Instituto HeartMath (Instituto dedicado a la investigación del equilibrio entre los sistemas físico, mental, emocional, mediante la coherencia entre el cerebro del corazón y el cerebro encefálico), nos brinda una comprensión más amplia del término: La resiliencia es la capacidad de prepararse para, recuperarse de, y adaptarse ante una situación de estrés, reto o adversidad.
La palabra clave en la definición es capacidad, que se refiere a la cantidad de algo que se tiene. Puedes pensar en tu capacidad de resiliencia actual como la cantidad de energía que has almacenado en tu batería interna y de la que te alimentas para manejar tus desafíos y tareas diarias. La resiliencia es la energía que tienes disponible para usar no solo físicamente, sino también mental, emocional y espiritualmente. Cuando tienes un alto nivel de resiliencia o una batería interna completamente cargada, tienes una mayor capacidad, que es necesaria para mantener la calma, pensar claramente y regular las emociones; también para que no reacciones de forma exagerada.
Por otro lado, de manera similar a la batería de un coche que se ha agotado y que es imposible arrancar, cuando tu batería interna se agota, no hay energía de donde “arrancar” las acciones que necesitas, lo que hace difícil que puedas ofrecer lo mejor de ti, que respondas adecuadamente a situaciones difíciles y cotidianas. Lo que también puede terminar agotando aún más tu energía.
Saber evitar las fugas de energía también es importante para construir y mantener tus reservas. Tener una buena cantidad de energía almacenada mejora tu habilidad para mantener tu enfoque, claridad mental y solidez emocional a lo largo del día.
Una forma muy importante de renovar la energía y recargar la batería interna es tener suficiente sueño ininterrumpido y regenerativo. El sueño es una de las formas más básicas en las que el cuerpo renueva sus niveles de energía. A veces, por el mismo drenaje de energía, es difícil conseguir un sueño de buena calidad.
Al construir tu resiliencia estarás mejor preparad@, te adaptarás más rápidamente, tomarás decisiones más inteligentes y permanecerás en claridad y calma ante situaciones que surjan a lo largo del día. Tener una mayor resiliencia no significa que no te encuentres con situaciones desafiantes, lo que significa es que tendrás una capacidad interna que te dará la habilidad, la energía y la resolución, para manejar cualquier cosa que surja.
El aprendizaje y la aplicación de técnicas de coherencia corazón-mente, pueden incrementar tus reservas de energía, dándote más combustible para cuando lo necesites. Una clave para construir y mantener la resiliencia, es gestionar cómo gastas y renuevas la energía. El objetivo es no desperdiciar energía innecesariamente y reponer eficazmente tus reservas.
Dimensiones de la Resiliencia
Hay cuatro dimensiones de resiliencia: física, emocional, mental y espiritual. Para ser totalmente resiliente, es importante prestar atención a las cuatro dimensiones porque cada una afecta a las demás.
Algunas personas son naturalmente más resilientes en una dimensión que en otra. Se considera que tienen más resiliencia emocional aquellas personas que pueden regular mejor sus emociones y mantener la calma y la compostura bajo presión. Sin embargo es importante tomar en cuenta que personas que son más resilientes en una dimensión, pueden encontrarse bajas en su estado general de resiliencia si permiten que su energía o batería interna se drene en alguna de las otras dimensiones.
No son solo los grandes gastos de energía los que agotan tu batería, en realidad se pierde más energía debido a la acumulación de sentimientos sutiles como la preocupación, la tristeza o la frustración, que al final del día se convierten en grandes pérdidas de energía. Algunas de las hormonas producidas durante una interacción estresante permanecen en tu sistema durante muchas horas y pueden afectar tu capacidad para conseguir un sueño renovador y también pueden disminuir tu poder para concentrarte y pensar con claridad.
El objetivo es que seas capaz de construir y mantener tu resiliencia mediante el uso de las técnicas de coherencia corazón-mente, para que puedas rendir mejor a lo largo del día, no solo en el trabajo, sino en todos los aspectos de su vida.
Ser más inteligente emocionalmente en cuanto a la forma de gastar y renovar tu energía puede ayudarte a construir y sostener tu resiliencia para que sea menos probable que caigas en las etapas de agotamiento físico, mental o emocional.
Construir y sostener tu resiliencia también puede ayudarte a terminar el día menos agotad@, y permite que disfrutes más de tu vida y tus relaciones.
Autora: Mafo Plata