En la búsqueda del amor o incluso en las amistades, es probable que en algún momento te encuentres en una situación en la que no eres la opción elegida. En tales momentos, muchas personas experimentan un golpe a su sentido de identidad. En el corazón de esta cuestión están nuestra necesidad innata de pertenecer y nuestro deseo de ser valorados. En este artículo, exploraremos por qué este fenómeno ocurre y cómo podemos manejarlo de manera saludable.
¿Por qué no ser elegidos afecta nuestro sentido de identidad?
En primer lugar, es importante entender lo que significa la identidad. Somos seres sociales por naturaleza. Nuestro sentido de identidad se construye en gran parte a través de nuestra interacción con los demás y nuestra percepción de cómo nos ven. Cuando no somos la opción elegida en una relación, ya sea romántica o platónica, esto puede dar lugar a preguntas sobre nuestro valor y a dudas sobre nuestra autoimagen.
La necesidad de pertenecer
Desde un punto de vista evolutivo, la necesidad de pertenecer a un grupo es una de las necesidades más fundamentales del ser humano. Siendo parte de un grupo nos proporcionaba protección y aumentaba nuestras posibilidades de supervivencia. Aunque nuestros entornos sociales han cambiado desde entonces, esta necesidad sigue siendo parte de nuestra psicología subyacente. Cuando no somos elegidos, puede sentirse como un rechazo a nivel del grupo, lo cual puede activar este temor subyacente a la exclusión.
El deseo de ser valorado
A nivel interpersonal, cuando no somos elegidos, puede sentirse como un juicio sobre nuestro valor como individuo. Puede surgir la pregunta: "¿No soy lo suficientemente bueno?". Este juicio percibido puede ser especialmente duro si hemos invertido mucho de nosotros mismos en la relación. El deseo de ser valorado es otro aspecto fundamental de nuestra psicología. Nos ayuda a desarrollar una autoestima saludable y es una parte integral de nuestro sentido de identidad y autoestima.
Manejo del rechazo
Aceptar tus sentimientos
El primer paso para enfrentar estos sentimientos es simplemente reconocer que existen. Es normal sentirse herido y desilusionado cuando no eres la elección de alguien. Es importante no ignorar estos sentimientos ni descontarlos como sin importancia. Tómate el tiempo para procesarlos.
Reexaminar las creencias subyacentes
Muchas veces, el golpe a nuestro sentido de identidad proviene de creencias subyacentes sobre nuestro valor que asumimos como verdaderas. Por ejemplo, puedes creer que no ser elegido significa que hay algo mal contigo o que no eres lo suficientemente bueno. Es importante identificar y cuestionar estas creencias. ¿Son realmente ciertas? ¿Existe alguna evidencia en contra de ellas? ¿Podría haber otras explicaciones para no ser elegido que no dependen de tu valor como persona?
Construir una autoestima saludable
Una autoestima saludable no depende de la aprobación de los demás. Trabaja en valorarte a ti mismo por quien eres, no por cómo te perciben los demás. Una manera de hacer esto es a través de la autoafirmación. Identifica cuáles son tus fortalezas, logros y valores y recuérdatelos regularmente.
Buscar apoyo social
No subestimes el valor del apoyo social. Hablar de tus sentimientos con alguien de confianza puede ser increíblemente útil. También puede ser útil tener una red de apoyo en la que puedas depender durante estos momentos difíciles.
En conclusión, no ser elegido puede ser un golpe al sentido de la identidad debido a nuestras necesidades innatas de pertenecer y ser valorados. Sin embargo, al reconocer nuestros sentimientos, examinar nuestras creencias subyacentes, construir una autoestima saludable y buscar apoyo social, podemos manejar estos momentos de manera saludable y constructiva.